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Porrusalda Casera: Un Clásico Vasco

La porrusalda es mucho más que una simple sopa de puerros y patatas. Es un plato que evoca tradición, calidez y los sabores auténticos de la cocina vasca. Su textura suave y su sabor delicado la convierten en una opción ideal como primer plato o incluso como una cena ligera y nutritiva. Esta receta te guiará paso a paso para preparar una purrusalda casera que te transportará directamente al corazón del País Vasco.

Ingredientes

  •  3 puerros grandes (solo la parte blanca y un poco de la parte verde clara)
  • 4 patatas medianas
  • 1 zanahoria mediana (opcional, pero aporta un toque dulce)
  • 1 litro de caldo de verduras (o agua)
  • 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra recién molida al gusto
  • Perejil fresco picado para decorar (opcional)

Preparación

 * Limpia y corta las verduras: Lava cuidadosamente los puerros bajo el grifo, asegurándote de eliminar cualquier resto de tierra entre las capas. Córtalos por la mitad a lo largo y luego en rodajas finas. Pela las patatas y córtalas en trozos medianos. Si utilizas zanahoria, pélala y córtala en rodajas finas o en dados pequeños.

 * Sofríe los puerros: En una olla grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade los puerros y la zanahoria (si la utilizas) y sofríe lentamente durante unos 10-15 minutos, removiendo de vez en cuando. El objetivo es que los puerros se ablanden y se vuelvan transparentes sin llegar a dorarse. Este paso es crucial para desarrollar el sabor dulce característico de la purrusalda.

 * Añade las patatas y el caldo: Incorpora las patatas troceadas a la olla y remueve durante un par de minutos para que se impregnen del aceite y los sabores del sofrito. Vierte el caldo de verduras (o el agua) hasta cubrir las patatas y los puerros. Si utilizas agua, puedes añadir una pastilla de caldo de verduras para intensificar el sabor, aunque un buen caldo casero siempre será la mejor opción.

 * Cocina a fuego lento: Lleva la sopa a ebullición, luego reduce el fuego a bajo, tapa la olla y cocina durante unos 20-25 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas. Puedes comprobar la cocción pinchándolas con un tenedor.

 * Tritura (opcional): Si prefieres una textura más fina y cremosa, puedes retirar una parte de las verduras cocidas con un cucharón y triturarlas con una batidora de mano o un pasapurés. Luego, vuelve a incorporar la crema a la olla y mezcla bien. Algunas recetas tradicionales dejan la purrusalda con trozos, así que este paso es totalmente a tu gusto.

 * Sazona y sirve: Prueba la purrusalda y sazona con sal y pimienta negra recién molida al gusto. Remueve y cocina durante un par de minutos más para que los sabores se integren. Sirve la purrusalda caliente, adornada con perejil fresco picado si lo deseas.

Consejos y trucos

 * Calidad de los puerros: Utiliza puerros frescos y tiernos. La parte blanca es la más apreciada por su sabor suave, pero un poco de la parte verde clara también aporta un toque interesante.

 * Caldo casero: Un buen caldo de verduras casero realzará el sabor de la purrusalda de manera significativa.

 * Textura: Ajusta la cantidad de caldo según la textura que prefieras. Si te gusta más espesa, añade menos líquido.

 * Variaciones: Algunas recetas incluyen otros ingredientes como bacalao desalado y desmigado, costilla de cerdo o incluso un chorrito de nata al final para darle un toque más cremoso.

 * Acompañamiento: La purrusalda se puede acompañar con un buen trozo de pan crujiente.

¡Disfruta de esta deliciosa y reconfortante purrusalda casera! Es un plato sencillo que te llenará de sabor y te hará sentir el calor de la cocina vasca. ¡Buen provecho!

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