Un Soplo de Frescura Andaluza: Gazpachuelo Frío con el Toque Salino de las Aceitunas

El gazpachuelo es una joya de la gastronomía andaluza, una sopa fría y cremosa originaria de Málaga que sorprende por su sencillez y su sabor único. A diferencia del gazpacho rojo más conocido, el gazpachuelo se caracteriza por su base de mayonesa suave y su caldo ligero, tradicionalmente enriquecido con patata cocida y pescado blanco. En esta versión, le añadiremos el toque vibrante y salino de las aceitunas, creando una sinfonía de sabores refrescante y apetitosa, ideal para combatir el calor estival en España.
Ingredientes (para 4-6 porciones):
* Para la mayonesa:
* 1 huevo grande, a temperatura ambiente
* 150 ml de aceite de oliva virgen extra (suave)
* Un chorrito de vinagre de Jerez
* Sal al gusto
* Para el gazpachuelo:
* 500 ml de caldo de pescado frío (casero o de buena calidad)
* 2 patatas medianas, cocidas y frías, peladas y cortadas en cubos pequeños
* 100 g de pescado blanco cocido y desmenuzado (merluza, rape, etc.)
* 50 g de aceitunas verdes sin hueso, cortadas por la mitad o en rodajas
* 1 diente de ajo pequeño, machacado (opcional, para un toque más intenso)
* Unas gotas de zumo de limón (opcional, para un extra de frescura)
* Perejil fresco picado, para decorar
* Huevo duro picado, para decorar (opcional)
Preparación:
* Prepara la mayonesa casera: En un vaso de batidora, introduce el huevo, una pizca de sal y el chorrito de vinagre. Comienza a batir a velocidad baja y ve añadiendo el aceite de oliva en un hilo fino y constante hasta que la mayonesa emulsione y espese. Prueba y rectifica de sal si es necesario. Reserva en el frigorífico. Si prefieres una opción más rápida, puedes utilizar mayonesa de buena calidad ya preparada (aproximadamente 150-200 g).
* Prepara la base del gazpachuelo: En un bol grande, mezcla el caldo de pescado frío con la mayonesa reservada. Bate suavemente con unas varillas hasta que la mayonesa se disuelva por completo y el líquido adquiera una textura ligeramente cremosa y homogénea.
* Incorpora los ingredientes sólidos: Añade al bol los cubos de patata cocida, el pescado blanco desmenuzado y las aceitunas verdes cortadas. Si deseas un toque más de sabor, incorpora el diente de ajo machacado (con moderación para que no domine). Mezcla suavemente para distribuir los ingredientes de manera uniforme.
* Ajusta el sabor y la textura: Prueba el gazpachuelo y sazona con sal si es necesario. Si prefieres un punto más ácido, añade unas gotas de zumo de limón al gusto. Si la consistencia te parece demasiado espesa, puedes añadir un poco más de caldo de pescado frío hasta alcanzar la textura deseada (debe ser una sopa ligera pero con cuerpo).
* Enfría bien: Cubre el bol con papel film y refrigera el gazpachuelo durante al menos 2 horas para que esté bien frío y los sabores se asienten. Lo ideal es prepararlo con antelación y dejarlo enfriar en la nevera durante varias horas o incluso durante la noche.
* Sirve y decora: Sirve el gazpachuelo frío en cuencos individuales. Decora cada porción con perejil fresco picado y, si lo deseas, con huevo duro picado para un extra de sabor y textura.
Variaciones y consejos:
* Tradicionalmente, el gazpachuelo puede llevar otros ingredientes como gambas cocidas y peladas o trozos de pan remojado en leche (que luego se trituran para dar más cremosidad).
* Para una versión más ligera, puedes reducir la cantidad de mayonesa o utilizar una mayonesa más ligera.
* Asegúrate de que todos los ingredientes estén bien fríos antes de combinarlos para obtener un gazpachuelo realmente refrescante.
* El toque salino de las aceitunas verdes combina maravillosamente con la suavidad de la mayonesa y el sabor delicado del pescado. Puedes utilizar aceitunas rellenas de pimiento para un contraste de color y sabor.
¡Disfruta de este gazpachuelo frío con aceitunas, un verdadero manjar andaluz que te revitalizará en los días de calor! ¡Que aproveche!