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Sopa de Ajo Castellana: Un Clásico Reconfortante

La sopa de ajo, también conocida como sopa castellana, es un plato humilde y tradicional de la cocina española, especialmente arraigado en Castilla y León. Con ingredientes tan básicos como ajo, pan, caldo y huevo, esta sopa demuestra cómo la sencillez puede dar lugar a un plato lleno de sabor y calidez, perfecto para los días fríos o como un entrante nutritivo.

Aunque existen diversas variaciones regionales, la esencia de la sopa de ajo radica en el sofrito de ajo y pimentón, que impregna el caldo y el pan con su aroma característico. Esta receta te guiará para preparar una sopa de ajo castellana auténtica y deliciosa, con algunos consejos para adaptarla a tu gusto.

Ingredientes (para 4 personas):

 * 6-8 dientes de ajo, laminados

 * 150 gramos de pan del día anterior (preferiblemente tipo hogaza), cortado en rebanadas finas

 * 1 cucharadita de pimentón dulce de La Vera

 * 1/2 cucharadita de pimentón picante de La Vera (opcional)

 * 1 litro de caldo de pollo o verduras

 * 4 huevos

 * Aceite de oliva virgen extra

 * Sal al gusto

Opcional:

 * Unas hebras de azafrán

 * Un chorrito de vino blanco

 * Perejil fresco picado para decorar

Preparación:

 * Sofríe el ajo: En una cazuela de barro o una olla, añade un chorro generoso de aceite de oliva. Calienta a fuego medio y añade los ajos laminados. Sofríe hasta que estén dorados y fragantes, pero ten cuidado de que no se quemen, ya que amargarían la sopa.

 * Añade el pimentón: Retira la cazuela del fuego momentáneamente y añade el pimentón dulce (y el picante, si lo usas). Remueve rápidamente para que se mezcle con el aceite y el calor residual del ajo, liberando su aroma sin quemarse. Si usas azafrán, añádelo ahora también.

 * Incorpora el pan: Añade las rebanadas de pan a la cazuela y remueve para que se empapen bien con el aceite y el pimentón. Cocina durante un par de minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que el pan esté ligeramente dorado.

 * Vierte el caldo: Vierte el caldo caliente sobre el pan y el sofrito. Sube el fuego y lleva a ebullición. Luego, reduce el fuego y deja cocinar a fuego lento durante unos 15-20 minutos para que el pan se deshaga y espese la sopa. Si deseas añadir vino blanco, este es el momento.

 * Escalfa los huevos (opcional): Tradicionalmente, los huevos se escalfan directamente en la sopa. Para ello, haz huecos en la sopa con una cuchara y casca un huevo en cada hueco. Tapa la cazuela y cocina a fuego bajo durante unos 3-5 minutos, o hasta que las claras estén cocidas y las yemas aún estén líquidas. Si prefieres, puedes escalfar los huevos aparte y añadirlos al servir.

 * Sirve caliente: Prueba la sopa y ajusta de sal si es necesario. Sirve la sopa de ajo caliente en cuencos individuales, con un huevo escalfado en cada uno (si los has cocinado así). Espolvorea con perejil fresco picado si lo deseas.

Consejos y Variaciones:

 * La calidad del pan es importante. Un pan rústico con buena miga le dará más cuerpo a la sopa.

 * No dejes que el ajo se queme al sofreír, ya que esto arruinaría el sabor de la sopa.

 * Ajusta la cantidad de pimentón picante a tu gusto.

 * Si no tienes caldo casero, puedes usar caldo de brick de buena calidad.

 * Algunas variantes incluyen un hueso de jamón durante la cocción del caldo para darle más sabor.

 * Para una sopa más espesa, puedes añadir un poco más de pan.

 * Si no te gusta el huevo escalfado, puedes servir la sopa sin él o añadir huevo duro picado.

La sopa de ajo castellana es un plato reconfortante y nutritivo, perfecto para cualquier época del año. Su sencillez no resta sabor, y su aroma inconfundible evoca la tradición de la cocina española. ¡Disfruta de esta deliciosa sopa!

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