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El Auténtico Torreznillo de Soria: Un Bocado Crujiente de Tradición

El torrezno de Soria no es solo un trozo de panceta frita; es un emblema de la gastronomía soriana, un manjar que evoca reuniones familiares, mercados bulliciosos y el sabor auténtico de la tierra. Su secreto reside en la calidad de la materia prima y una fritura cuidadosa que transforma la piel en una corteza dorada y crujiente, mientras la carne interior se mantiene jugosa y tierna.

Esta receta te guiará paso a paso para recrear en tu cocina este bocado irresistible. ¡Prepárate para disfrutar de un auténtico torrezno de Soria!

Ingredientes:

  • 500 gramos de panceta de cerdo fresca (preferiblemente con piel gruesa)
  • Sal gruesa

Preparación:

 * Preparación de la panceta:

Comienza por preparar la panceta. Con un cuchillo afilado, realiza cortes paralelos en la piel de la panceta, formando cuadrículas de aproximadamente 2-3 centímetros. Estos cortes ayudarán a que la piel se infle y quede crujiente durante la fritura. Asegúrate de no cortar demasiado profundo, solo la piel y una pequeña parte de la grasa superficial.

 * Salazón:

Espolvorea generosamente la panceta por ambos lados con sal gruesa. La sal no solo sazonará la carne, sino que también ayudará a extraer la humedad, lo que contribuirá a una corteza más crujiente. Deja reposar la panceta salada en el frigorífico durante al menos 2 horas, o idealmente durante toda la noche.

 * Primer paso de fritura (a fuego lento):

En una sartén grande y profunda, coloca la panceta con la piel hacia abajo. Cubre la panceta con agua fría, aproximadamente hasta la mitad de su altura. Lleva la sartén a fuego medio-bajo y cocina lentamente hasta que el agua se evapore por completo y la panceta comience a freírse en su propia grasa. Este proceso puede llevar entre 30 y 45 minutos. La cocción lenta permite que la grasa se derrita gradualmente y la piel comience a ablandarse.

 * Segundo paso de fritura (para el crujiente):

Una vez que el agua se haya evaporado y la panceta esté dorada por la parte inferior, sube el fuego a medio-alto. Vigila de cerca los torreznos, ya que ahora se cocinarán más rápido y pueden quemarse fácilmente. Con una espumadera, ve rociando la piel con la grasa caliente. Esto ayudará a que la piel se infle y se vuelva espectacularmente crujiente. Cocina hasta que la piel esté dorada, burbujeante y muy crujiente por todos lados.

 * Retirar y escurrir:

Retira los torreznos de la sartén con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

 * Servir:

Sirve los torreznos de Soria calientes, cortados en porciones. Son perfectos como aperitivo, tapa o incluso como acompañamiento de otros platos. ¡Disfruta de su irresistible textura y sabor!

Un consejo extra: Para un toque aún más auténtico, algunos cocineros añaden una hoja de laurel al agua durante la primera fase de cocción. Esto le aporta un sutil aroma al torrezno.

¡Espero que disfrutes preparando y degustando este delicioso manjar soriano! ¿Hay algo más en lo que pueda ayudarte?

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