Patatas Revolconas: Un Clásico Rústico Lleno de Sabor
Las patatas revolconas, también conocidas como patatas meneás o revueltas, son un plato emblemático de la cocina tradicional española, especialmente arraigado en regiones como Castilla y León y Extremadura. Su sencillez, basada en ingredientes humildes como patatas, pimentón y torreznos, contrasta con su sabor intenso y su textura reconfortante. Este plato rústico es ideal para los días frescos y evoca la cocina de las abuelas, llena de autenticidad y sabor.

Ingredientes:
- 1 kg de patatas, preferiblemente de una variedad para cocer (como la Kennebec o la Monalisa)
- 150-200 gramos de panceta curada o torreznos
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de pimentón dulce de La Vera
- 1 cucharadita de pimentón picante de La Vera (opcional, al gusto)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Preparación:
* Cocción de las patatas: Lava bien las patatas y ponlas a cocer en una olla grande con agua y sal. No es necesario pelarlas. Cocina hasta que estén tiernas y se puedan pinchar fácilmente con un tenedor (unos 20-30 minutos, dependiendo del tamaño).
* Preparación de los torreznos: Mientras las patatas se cocinan, corta la panceta o los torreznos en dados pequeños. En una sartén a fuego medio, fríelos en su propia grasa hasta que estén dorados y crujientes. Retira los torreznos de la sartén con una espumadera y resérvalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Reserva también la grasa que ha soltado la panceta en la sartén.
* Sofrito aromático: Pela los dientes de ajo y lamínalos finamente. En la misma sartén donde has frito los torreznos (si hay mucha grasa, retira un poco), añade un chorrito de aceite de oliva si es necesario y sofríe los ajos laminados a fuego bajo hasta que estén dorados y fragantes, teniendo cuidado de que no se quemen. Retira la sartén del fuego.
* Majar las patatas: Una vez que las patatas estén cocidas, escúrrelas y pélalas mientras aún están calientes. Colócalas en un bol grande y májalas con un tenedor o un pasapurés rústico. No es necesario obtener un puré completamente fino; es preferible que queden algunos trozos.
* Incorporación del pimentón y la grasa: Añade a las patatas majadas el pimentón dulce y, si lo usas, el pimentón picante. Remueve bien para que se integren los sabores y el color. Vierte la grasa reservada de freír los torreznos (sin los ajos fritos, a menos que te gusten crujientes) sobre las patatas y mezcla enérgicamente hasta obtener una textura homogénea y ligeramente untuosa. Si es necesario, puedes añadir un poco más de aceite de oliva virgen extra para conseguir la consistencia deseada. Prueba y rectifica de sal si es necesario.
* Presentación: Sirve las patatas revolconas calientes en platos individuales o en una fuente para compartir. Espolvorea generosamente los torreznos crujientes por encima justo antes de servir.
Consejos y Variaciones:
- Algunas recetas tradicionales incluyen comino en polvo junto con el pimentón para darle un toque de sabor adicional.
- Si no tienes torreznos, puedes usar panceta ahumada cortada en dados o incluso chorizo frito en rodajas pequeñas.
- Para una textura más suave, puedes pasar las patatas cocidas por un pasapurés fino en lugar de majarlas con un tenedor. Sin embargo, la textura rústica es parte de la esencia de este plato.
- Las patatas revolconas son un acompañamiento excelente para huevos fritos, carnes a la brasa o incluso como tapa contundente.
- Si quieres darle un toque fresco, puedes espolvorear un poco de perejil picado por encima junto con los torreznos.
¡Disfruta de este plato sencillo pero lleno de sabor! Las patatas revolconas son un verdadero homenaje a la cocina tradicional española, donde la calidad de los ingredientes y la elaboración con cariño son la clave del éxito. ¡Buen provecho!