Costillas Estilo Foster: Jugosidad y Sabor Agridulce que Enamoran

 

Las costillas de cerdo son un corte de carne sabroso y versátil que se presta a diversas preparaciones. Esta receta de costillas estilo Foster toma inspiración de la icónica salsa que lleva su nombre, combinando la dulzura del azúcar moreno, el toque cítrico del zumo de naranja y limón, la calidez de la canela y un punto de licor (opcional pero recomendable) para crear una glasa rica y pegajosa que envuelve las costillas, aportándoles un sabor único y delicioso.

El proceso comienza con una cocción lenta de las costillas para asegurar su ternura y jugosidad, seguida de un horneado con la salsa Foster que se carameliza, creando una capa brillante y llena de sabor. El resultado son unas costillas que se deshacen en la boca, con un equilibrio perfecto entre lo dulce, lo ácido y lo especiado.

Ingredientes para unas costillas estilo Foster irresistibles (para 4 personas):

 * 1.5 kg de costillas de cerdo (preferiblemente costillar entero o cortado en tiras)

 * 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

 * Sal y pimienta negra recién molida al gusto

Para la salsa Foster:

 * 50 gramos de mantequilla sin sal

 * 100 gramos de azúcar moreno

 * El zumo de 1 naranja grande

 * El zumo de ½ limón

 * 1 cucharadita de canela molida

 * ¼ cucharadita de nuez moscada rallada

 * Una pizca de clavo molido (opcional)

 * 2 cucharadas de ron oscuro o bourbon (opcional)

 * Una pizca de sal

Elaboración con paciencia para un resultado espectacular:

 * Prepara las costillas: Precalienta el horno a 160ºC (calor arriba y abajo). Unta las costillas con aceite de oliva, sal y pimienta negra por ambos lados.

 * Horneado lento para ternura: Coloca las costillas en una bandeja para horno cubierta con papel de aluminio (para evitar que se sequen). Hornea durante aproximadamente 1.5 – 2 horas, o hasta que la carne esté tierna y se separe fácilmente del hueso.

 * Prepara la salsa Foster: Mientras las costillas se hornean, prepara la salsa. En una cacerola mediana a fuego medio, derrite la mantequilla. Añade el azúcar moreno y remueve hasta que se disuelva por completo.

 * Añade los cítricos y especias: Incorpora el zumo de naranja, el zumo de limón, la canela molida, la nuez moscada y el clavo molido (si lo usas). Remueve bien y deja que la salsa hierva a fuego lento durante unos 5-7 minutos, hasta que espese ligeramente.

 * El toque de licor (opcional): Si deseas añadir ron o bourbon, retira la cacerola del fuego y con cuidado vierte el licor. Puedes flambear la salsa inclinando ligeramente la cacerola hacia la llama (ten precaución). Deja que el alcohol se evapore durante unos segundos y vuelve a poner la cacerola al fuego bajo. Sazona la salsa con una pizca de sal.

 * Glasea las costillas: Una vez que las costillas estén tiernas, retíralas del horno y desecha el papel de aluminio. Pincela generosamente las costillas por ambos lados con la salsa Foster.

 * Horneado final para caramelizar: Vuelve a colocar las costillas en la bandeja para horno (sin cubrir) y sube la temperatura del horno a 180ºC. Hornea durante otros 15-20 minutos, pincelando con más salsa Foster cada 5 minutos, hasta que estén bien glaseadas, brillantes y ligeramente caramelizadas.

 * Reposo y a disfrutar: Retira las costillas del horno y déjalas reposar durante unos 5-10 minutos antes de cortarlas y servirlas.

Consejos para unas costillas estilo Foster perfectas:

 * Cocción lenta es clave: El horneado lento a baja temperatura asegura que las costillas queden muy tiernas y jugosas.

 * Salsa con equilibrio: Prueba la salsa Foster y ajusta el dulzor o la acidez según tu gusto.

 * Glaseado gradual: Pincelar las costillas varias veces durante el horneado final ayuda a crear una capa de salsa pegajosa y sabrosa.

 * No quemar la salsa: Cocina la salsa a fuego lento para evitar que el azúcar se queme y se amargue.

 * Variaciones: Puedes añadir un poco de salsa Worcestershire o salsa de soja a la salsa Foster para un toque umami.

 * Acompañamientos: Sirve estas deliciosas costillas con arroz blanco, puré de patatas, patatas fritas o una ensalada fresca.

Estas costillas estilo Foster son una explosión de sabor que combina la ternura de la carne de cerdo con la dulzura caramelizada y los toques cítricos y especiados de la salsa. ¡Un plato que seguro encantará a todos!