Crema Catalana Auténtica
La crema catalana es un postre emblemático de la gastronomía catalana, similar a la crème brûlée francesa pero con sus propias particularidades. Su base de crema suave y aromatizada con cítricos y canela, cubierta por una capa crujiente de azúcar caramelizado, la convierte en un postre exquisito y reconfortante. Perfecta para cualquier ocasión especial o simplemente para disfrutar de un dulce tradicional.

Rinde: 6-8 porciones
Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 30-40 minutos
Tiempo de enfriado: Mínimo 4 horas (idealmente toda la noche)
Ingredientes:
- 500 ml de leche entera
- 6 yemas de huevo grandes
- 125 gramos de azúcar
- La piel de 1 limón (solo la parte amarilla, sin la parte blanca amarga)
- La piel de 1 naranja (solo la parte naranja, sin la parte blanca amarga)
- 1 rama de canela
- Azúcar extra para caramelizar la superficie
Utensilios necesarios:
- 6-8 recipientes de barro individuales y poco profundos (tradicionalmente llamados «cazuelitas») o ramequines
- Un soplete de cocina (opcional, pero recomendado para el caramelizado tradicional)
Instrucciones:
* Infusiona la leche: En un cazo mediano, vierte la leche entera. Añade la piel de limón, la piel de naranja y la rama de canela. Calienta la leche a fuego medio hasta que empiece a humear ligeramente, sin que llegue a hervir. Retira del fuego, tapa y deja infusionar durante al menos 15-20 minutos para que la leche absorba los aromas cítricos y de canela.
* Prepara las yemas y el azúcar: Mientras la leche se infusiona, en un bol grande, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla pálida y ligeramente espesa. No es necesario batir en exceso para incorporar aire, solo hasta que estén bien combinados.
* Tempera las yemas: Retira las pieles de los cítricos y la rama de canela de la leche infusionada. Vierte lentamente la leche caliente sobre la mezcla de yemas y azúcar, batiendo constantemente para evitar que las yemas se cocinen y se formen grumos.
Cocinado:
* Cocina la crema: Vierte la mezcla de crema en los recipientes de barro individuales o ramequines. Colócalos en una bandeja para horno. Vierte agua caliente en la bandeja hasta que alcance aproximadamente la mitad de la altura de los recipientes (baño María).
* Hornea la crema: Hornea en un horno precalentado a 160°C (325°F) durante unos 30-40 minutos, o hasta que la crema esté firme en los bordes pero aún ligeramente temblorosa en el centro. El tiempo puede variar según el tamaño de los recipientes.
* Enfría la crema: Retira los recipientes del horno y déjalos enfriar completamente a temperatura ambiente. Luego, cúbrelos con film transparente y refrigera durante al menos 4 horas, o idealmente toda la noche, para que la crema se asiente y se enfríe por completo.
Antes de Servir:
* Carameliza la superficie: Justo antes de servir, espolvorea una capa uniforme de azúcar sobre la superficie de cada crema catalana.
* Con soplete: Utiliza un soplete de cocina para caramelizar el azúcar. Mueve la llama uniformemente sobre la superficie hasta que el azúcar se derrita y forme una capa crujiente de color dorado. Ten cuidado de no quemar el azúcar.
* Sin soplete (opción menos tradicional): Si no tienes un soplete, puedes intentar caramelizar el azúcar bajo el grill del horno (con mucho cuidado para que no se queme) o utilizando una plancha de caramelizar específica. Sin embargo, el resultado no será tan uniforme ni tradicional como con el soplete.
* Sirve inmediatamente: Sirve la crema catalana inmediatamente después de caramelizar la superficie para disfrutar del contraste entre la crema fría y la capa crujiente de caramelo caliente.
¡Disfruta de esta deliciosa y auténtica crema catalana! Su sabor delicado y su textura contrastante la convierten en un postre inolvidable.