Lentejas con Carrillada: Un Guiso Reconfortante Lleno de Sabor y Ternura

Las lentejas con carrillada son un plato que combina la sencillez de las legumbres con la exquisitez de una carne melosa y llena de sabor. La carrillada, ya sea de cerdo o de ternera, es un corte gelatinoso que, cocinado lentamente, se deshace en la boca, impregnando las lentejas con su jugo rico y profundo. Este guiso es un abrazo cálido en un plato, ideal para los días en que se busca una comida nutritiva y reconfortante, con sabores que evocan la cocina tradicional y el cariño de los platos de cuchara.
Aunque la base de lentejas es similar a otros guisos, la incorporación de la carrillada eleva el plato a una categoría superior, aportando una textura y un sabor únicos. Es una receta que requiere paciencia para la cocción lenta de la carne, pero el resultado final recompensa la espera con creces.
Esta receta te guiará paso a paso para preparar unas lentejas con carrillada deliciosas y tiernas, perfectas para disfrutar en una comida familiar o para sorprender a tus invitados con un plato lleno de sabor.
Ingredientes:
- 250 g de lentejas pardinas (o la variedad que prefieras)
- 500 g de carrillada de cerdo o ternera, limpia de grasas y telillas
- 1 cebolla mediana picada
- 2 zanahorias medianas peladas y cortadas en rodajas
- 1 pimiento rojo mediano lavado, sin semillas y cortado en trozos
- 2 dientes de ajo picados
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de comino molido (opcional)
- 1 vaso de vino tinto (opcional)
- Caldo de carne (o agua)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida al gusto
- Perejil fresco picado para decorar (opcional)
Elaboración:
- Prepara las lentejas: Enjuaga las lentejas bajo agua fría corriente y escúrrelas. Las lentejas pardinas no suelen necesitar remojo previo.
- Sella la carrillada: En una olla grande, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio-alto. Sella los trozos de carrillada por todos lados hasta que estén dorados. Retira la carrillada y reserva.
- Sofríe las verduras: En la misma olla, añade un poco más de aceite si es necesario y sofríe la cebolla picada hasta que esté transparente y pochada, unos 5-7 minutos. Agrega los ajos picados y cocina durante un minuto más. Incorpora las zanahorias en rodajas y el pimiento rojo en trozos. Cocina durante unos 5 minutos, removiendo ocasionalmente.
- Añade las especias y el vino (opcional): Agrega el pimentón dulce, el comino molido (si lo usas) y la hoja de laurel a la olla. Si utilizas vino tinto, viértelo ahora y deja que se reduzca un poco, raspando el fondo de la olla para recoger los jugos.
- Incorpora la carrillada y las lentejas: Vuelve a colocar la carrillada en la olla. Añade las lentejas enjuagadas y cubre con caldo de carne (o agua), asegurándote de que la carne quede bien cubierta.
- Cocina a fuego lento: Lleva a ebullición, luego reduce el fuego a bajo, tapa la olla y cocina lentamente durante al menos 2-3 horas, o hasta que la carrillada esté muy tierna y se deshaga fácilmente con un tenedor y las lentejas estén cocidas. Remueve ocasionalmente y añade más caldo si es necesario.
- Sazona y sirve: Una vez que la carrillada y las lentejas estén tiernas, retira la hoja de laurel. Prueba el guiso y sazona con sal y pimienta negra recién molida al gusto. Sirve caliente, espolvoreado con perejil fresco picado si lo deseas.
Consejos para unas lentejas con carrillada deliciosas:
- Utiliza carrillada de buena calidad y límpiala bien.
- Un buen sellado de la carne intensifica su sabor.
- La cocción lenta es fundamental para que la carrillada quede muy tierna.
- Puedes añadir otras verduras como puerro o patata al guiso.
- Un hueso de jamón al principio de la cocción de las lentejas aportará un sabor extra.
- El vino tinto enriquece el sabor del guiso.
Las lentejas con carrillada son un plato contundente y lleno de sabor que te reconfortará en cualquier ocasión. ¡Buen provecho!