Filloas: El dulce bocado de la tradición gallega
Las filloas son un postre humilde pero delicioso, profundamente arraigado en la tradición culinaria de Galicia. Similares a las crepes francesas, pero con sus propias particularidades, las filloas son finas tortitas elaboradas con una masa líquida a base de harina, leche y huevos, que se cocinan en una plancha o sartén caliente hasta dorarse ligeramente.

Este dulce manjar gallego tiene una larga historia y está presente en diversas celebraciones y festividades, especialmente durante el Carnaval (Entroido). Su versatilidad permite disfrutarlas solas, espolvoreadas con azúcar, rellenas de nata, crema pastelera, mermelada, chocolate o incluso en preparaciones saladas.
Ingredientes para preparar unas deliciosas Filloas (para aproximadamente 12-15 unidades):
- 250 ml de leche entera (o una mezcla de leche y agua)
- 2 huevos medianos
- 125 g de harina de trigo
- Una pizca de sal
- Una cucharadita de azúcar (opcional, si se desean más dulces)
- Mantequilla o aceite para engrasar la sartén
Preparación, paso a paso, para disfrutar de este clásico gallego:
* Preparación de la masa: En un bol grande, bate los huevos con la leche y la pizca de sal (y el azúcar, si lo utilizas).
* Incorporación de la harina: Añade la harina tamizada poco a poco, mientras sigues batiendo con unas varillas o una batidora de mano, hasta obtener una masa fina y sin grumos. Es importante que la masa quede líquida para que las filloas sean finas.
* Reposo de la masa (opcional pero recomendable): Cubre el bol con papel film y deja reposar la masa en la nevera durante al menos 30 minutos. Esto permite que la harina se hidrate bien y las filloas queden más tiernas. Si tienes prisa, puedes omitir este paso.
* Calentar la sartén: Pon a calentar una sartén antiadherente de unos 20-24 cm de diámetro a fuego medio. Es importante que la sartén esté bien caliente antes de verter la masa.
* Engrasar la sartén: Engrasa ligeramente la sartén con un poco de mantequilla o aceite. Puedes utilizar un trozo de papel de cocina impregnado en grasa para distribuirla de manera uniforme.
* Cocinar las filloas: Vierte un cucharón de masa en el centro de la sartén caliente. Rápidamente, inclina y gira la sartén para que la masa se extienda formando una capa fina y uniforme por toda la superficie.
* Dorar por ambos lados: Cocina la filloa durante aproximadamente 1-2 minutos por cada lado, o hasta que los bordes empiecen a dorarse ligeramente y la superficie se vea cocida. Con una espátula fina, dale la vuelta con cuidado para cocinar el otro lado.
* Apilar las filloas: A medida que vayas cocinando las filloas, ve apilándolas en un plato. Puedes poner un trozo de papel de cocina entre cada una para evitar que se peguen.
* Servir y disfrutar: Sirve las filloas calientes o templadas. Puedes espolvorearlas con azúcar glas, rellenarlas con tus ingredientes dulces favoritos (nata montada, crema pastelera, mermelada, chocolate fundido) o incluso probarlas con rellenos salados como queso y jamón.
Las filloas son un bocado sencillo pero lleno de sabor y tradición. Su textura delicada y su versatilidad las convierten en un postre apreciado por grandes y pequeños. Ya sea en una celebración especial o como un capricho dulce en cualquier momento, las filloas siempre son una buena elección para disfrutar de un pedacito de la rica gastronomía gallega. ¡Que aproveche! (Que aproveite!)