Crema de Lentejas Casera: Suave, Nutritiva y Deliciosamente Reconfortante

La crema de lentejas es un plato sencillo pero lleno de bondades. Su textura suave y sedosa la hace especialmente apetecible, mientras que su base de lentejas la convierte en una fuente importante de nutrientes esenciales. Es una sopa versátil que se puede enriquecer con diversas verduras y especias, adaptándose a los gustos personales y a los ingredientes disponibles. Perfecta para una comida ligera, un entrante nutritivo o incluso como una cena reconfortante, la crema de lentejas casera es una opción saludable y deliciosa para toda la familia.
Preparar crema de lentejas en casa es un proceso rápido y económico. Con pocos ingredientes básicos y un poco de cocción, puedes obtener una sopa cremosa y llena de sabor. Esta receta te guiará paso a paso para elaborar una crema de lentejas suave y deliciosa.
Ingredientes:
- 250 g de lentejas pardinas (o rojas)
- 1 cebolla mediana picada
- 2 zanahorias medianas peladas y cortadas en rodajas
- 1 puerro (la parte blanca) lavado y cortado en rodajas
- 2 dientes de ajo picados
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de comino molido
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce
- Caldo de verduras (o agua)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida al gusto
- Opcional para servir: un chorrito de nata o leche, picatostes, hierbas frescas picadas (perejil, cilantro)
Elaboración:
- Lava las lentejas: Enjuaga las lentejas bajo agua fría corriente y escúrrelas. Las lentejas pardinas no suelen necesitar remojo previo, pero si utilizas otra variedad, consulta las indicaciones del paquete.
- Sofríe las verduras: En una olla grande, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla picada y sofríe hasta que esté transparente y pochada, unos 5-7 minutos.
- Incorpora el ajo, la zanahoria y el puerro: Agrega los ajos picados, las zanahorias en rodajas y el puerro a la olla. Cocina durante unos 5 minutos más, removiendo ocasionalmente, hasta que las verduras empiecen a ablandarse ligeramente.
- Añade las especias y el laurel: Agrega el comino molido, el pimentón dulce y la hoja de laurel a la olla. Remueve para que las especias se integren con las verduras y liberen su aroma.
- Incorpora las lentejas y el caldo: Añade las lentejas enjuagadas a la olla. Cubre las lentejas y las verduras con caldo de verduras (o agua). La cantidad debe ser suficiente para cubrir los ingredientes y dejar espacio para la cocción (aproximadamente el doble de volumen de las lentejas).
- Cocina a fuego lento: Lleva a ebullición, luego reduce el fuego a bajo, tapa la olla y cocina lentamente durante unos 30-40 minutos, o hasta que las lentejas estén muy tiernas y se deshagan fácilmente.
- Retira el laurel y tritura: Retira la hoja de laurel de la olla. Con una batidora de mano (o transfiriendo la sopa a una batidora de vaso), tritura la sopa hasta obtener una crema suave y homogénea. Si prefieres una textura más fina, puedes pasar la crema por un colador.
- Sazona y sirve: Vuelve a poner la crema en la olla si la has transferido. Prueba y sazona con sal y pimienta negra recién molida al gusto. Sirve caliente, acompañada de un chorrito de nata o leche, picatostes y hierbas frescas picadas si lo deseas. Un hilo de aceite de oliva también puede realzar el sabor.
Consejos para una crema de lentejas perfecta:
- Utiliza caldo de verduras casero para un sabor más intenso.
- Puedes añadir otras verduras como patata o calabacín para variar la textura y el sabor.
- Si no tienes comino molido, puedes usar otras especias como curry suave o una pizca de nuez moscada.
- Para una crema más rica, puedes añadir un poco de leche de coco al final de la cocción.
- La crema de lentejas se conserva bien en la nevera durante varios días y también se puede congelar.
¡Disfruta de esta crema de lentejas casera, un plato reconfortante y nutritivo que te llenará de energía!