Gazpacho de Remolacha: Un Estallido de Color y Sabor Refrescante
El gazpacho de remolacha es una reinterpretación moderna y llena de personalidad del tradicional gazpacho andaluz. Su llamativo color morado intenso, aportado por la remolacha, lo convierte en un plato visualmente atractivo, mientras que su sabor combina la frescura de las hortalizas con un dulzor terroso característico. Esta sopa fría es una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes, lo que la convierte en una opción nutritiva y revitalizante, perfecta para combatir el calor del verano o como un entrante original y ligero.

Preparar gazpacho de remolacha en casa es un proceso sencillo que requiere pocos ingredientes y una batidora. El resultado es una sopa suave, refrescante y llena de sabor, que puedes personalizar fácilmente añadiendo otros ingredientes a tu gusto. Esta receta te guiará paso a paso para elaborar un gazpacho de remolacha casero que sorprenderá a tus invitados y te encantará por su originalidad y sus beneficios para la salud.
Ingredientes:
- 500 gramos de remolachas cocidas (puedes comprarlas ya cocidas para ahorrar tiempo)
- 2 tomates maduros
- 1/2 pepino pequeño
- 1/4 cebolla roja pequeña
- 1 diente de ajo pequeño (opcional, ajustar al gusto)
- 30 ml de aceite de oliva virgen extra
- 15-20 ml de vinagre de vino blanco (ajustar al gusto según la dulzura de la remolacha)
- Unas hojas de menta fresca (aproximadamente 5-6 hojas)
- Una pizca de sal (opcional, probar primero la dulzura de la remolacha)
- Agua fría (opcional, si se desea una consistencia más líquida)
- Hojas de menta fresca o pequeños trozos de remolacha, para decorar (opcional)
Elaboración:
- Prepara las hortalizas: Lava bien los tomates, el pepino y la cebolla. Corta los tomates y el pepino en trozos medianos. Pela la cebolla y córtala en cuartos. Pela el diente de ajo (si lo usas).
- Combina los ingredientes: Introduce en el vaso de la batidora las remolachas cocidas troceadas, los tomates, el pepino, la cebolla y el ajo (si lo usas).
- Añade los líquidos y condimentos: Agrega el aceite de oliva virgen extra, el vinagre de vino blanco y las hojas de menta fresca. Si lo deseas, añade una pizca de sal, pero prueba primero el dulzor de la remolacha, ya que a veces no es necesario añadir sal.
- Tritura hasta obtener una mezcla homogénea: Bate todos los ingredientes a velocidad alta hasta obtener una sopa suave y sin grumos. Si la consistencia es demasiado espesa para tu gusto, puedes añadir un poco de agua fría hasta alcanzar la textura deseada.
- Prueba y ajusta el sabor: Prueba el gazpacho y ajusta el punto de vinagre y sal si es necesario. Si la remolacha es muy dulce, puedes añadir un poco más de vinagre para equilibrar el sabor.
- Enfría: Vierte el gazpacho de remolacha en una jarra o recipiente hermético y refrigéralo durante al menos 2 horas para que esté bien frío antes de servir.
- Sirve y decora: Sirve el gazpacho de remolacha bien frío en vasos o cuencos. Decora con unas hojas de menta fresca o pequeños trozos de remolacha para darle un toque visual atractivo.

Consejos para un gazpacho de remolacha perfecto:
- Utiliza remolachas de buena calidad, preferiblemente asadas o cocidas al vapor para intensificar su sabor.
- Ajusta la cantidad de vinagre según la dulzura de la remolacha y tu preferencia personal.
- La menta fresca aporta un toque refrescante que combina muy bien con el dulzor de la remolacha.
- Puedes añadir otras hierbas frescas como cilantro o albahaca para variar el sabor.
- Si prefieres una textura más suave, puedes colar el gazpacho después de triturarlo.
- Acompaña el gazpacho de remolacha con crudités de verduras, picatostes o un hilo de aceite de oliva virgen extra.
¡Disfruta de este original y delicioso gazpacho de remolacha, una explosión de color y sabor que te refrescará en los días cálidos!