Tarta de Santiago: Un Dulce Símbolo de Peregrinación y Sabor Gallego
La Tarta de Santiago es mucho más que un postre; es un símbolo de la rica tradición gallega y un dulce recuerdo para los peregrinos que llegan a Santiago de Compostela. Con su sencilla elaboración a base de almendras, azúcar y huevos, esta tarta sin gluten destaca por su sabor intenso y su textura ligeramente arenosa. Coronada con la cruz de Santiago espolvoreada con azúcar glas, es un bocado que evoca historia, cultura y un sabor inconfundible.
Ingredientes Sencillos para un Sabor Auténtico:
Para preparar una deliciosa Tarta de Santiago para unas 8 porciones, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 250 g de almendras crudas molidas (puedes molerlas tú mismo o comprarlas ya molidas)
- 250 g de azúcar glas (y un poco más para decorar)
- 5 huevos medianos
- La ralladura de medio limón (opcional, pero aporta un toque fresco)
- Una pizca de canela molida (opcional)
- Mantequilla y harina para engrasar el molde
- La plantilla de la Cruz de Santiago (puedes imprimirla o hacerla en papel)
Elaboración Paso a Paso: Un Dulce Camino hacia el Sabor:
* Preparación del Molde: Precalienta el horno a 180°C (calor arriba y abajo). Engrasa un molde redondo de unos 20-22 cm de diámetro con mantequilla y espolvoréalo con harina. Retira el exceso de harina.
* Mezcla de Ingredientes Secos: En un bol grande, mezcla las almendras molidas con el azúcar glas. Si lo deseas, añade la ralladura de limón y la canela molida. Mezcla bien todos los ingredientes secos.
* Incorporación de los Huevos: Añade los huevos uno a uno a la mezcla de almendras y azúcar, batiendo bien después de cada adición hasta obtener una masa homogénea y sin grumos. La masa será bastante líquida, ¡no te preocupes!
* Horneado Lento y Aromático: Vierte la masa en el molde preparado. Hornea en el horno precalentado durante unos 35-45 minutos, o hasta que la tarta esté dorada y al pincharla con un palillo, éste salga limpio. El tiempo de cocción puede variar ligeramente según el horno.
* Enfriado y Decoración Emblemática: Una vez horneada, retira la tarta del horno y déjala enfriar completamente en el molde antes de desmoldarla con cuidado. Cuando la tarta esté fría, coloca la plantilla de la Cruz de Santiago en el centro de la superficie. Espolvorea generosamente azúcar glas por toda la tarta, asegurándote de que la plantilla quede bien cubierta. Retira con cuidado la plantilla para revelar la característica cruz blanca sobre el fondo dorado de la tarta.
* Servir y Disfrutar: La Tarta de Santiago se sirve tradicionalmente sola, aunque también puedes acompañarla de una bola de helado o un poco de nata montada. Es perfecta para disfrutar con un café, un licor gallego o simplemente como un delicioso postre.
Un Símbolo Dulce con Historia:
La sencillez de la Tarta de Santiago esconde un sabor profundo y una rica historia ligada al Camino de Santiago. Su elaboración con ingredientes básicos y su inconfundible decoración la convierten en un postre único y representativo de la repostería gallega. ¡Anímate a preparar esta joya dulce y comparte un pedazo de la tradición de Galicia!
