Pestiños Andaluces: Un Bocado Crujiente con Sabor a Anís y Naranja
Los pestiños son unos dulces fritos y bañados en miel o azúcar, típicos de Andalucía. Su masa, aromatizada con anís y naranja, se fríe hasta obtener una textura crujiente y dorada, y luego se endulza para crear un bocado irresistible. Son relativamente sencillos de preparar y su sabor evoca las celebraciones y la repostería tradicional andaluza. Esta receta te guiará para preparar unos pestiños deliciosos y auténticos.

Rinde: Aproximadamente 30-40 pestiños
Tiempo de preparación: 30 minutos
Tiempo de reposo de la masa: 30 minutos
Tiempo de fritura: Variable, unos minutos por tanda
Ingredientes:
- 250 ml de aceite de oliva virgen extra (y más para freír)
- La piel de 1 naranja (solo la parte naranja, sin la parte blanca amarga)
- 1 cucharadita de matalahúva (anís en grano)
- 125 ml de vino blanco seco
- 250 gramos de harina de trigo
- Una pizca de sal
- Para espolvorear: Azúcar glas
Para el Baño (opcional):
- 200 gramos de miel
- 50 ml de agua
- Unas gotas de zumo de limón
Instrucciones:
La masa
* Aromatiza el aceite: En una sartén, calienta los 250 ml de aceite de oliva a fuego medio junto con la piel de naranja y la matalahúva. Cocina a fuego bajo durante unos 5-10 minutos para que el aceite se aromatice. Retira del fuego y deja enfriar completamente. Cuela el aceite para retirar la piel de naranja y la matalahúva.
* Prepara la masa: En un bol grande, mezcla la harina con la pizca de sal. Haz un hueco en el centro y vierte el aceite aromatizado y el vino blanco. Mezcla con una cuchara de madera hasta que los ingredientes se integren.
* Amasa: Pasa la masa a una superficie enharinada y amasa durante unos 5-10 minutos hasta obtener una masa suave, elástica y que no se pegue a las manos. Si es necesario, añade un poco más de harina o vino blanco para ajustar la textura.
* Reposo: Forma una bola con la masa, envuélvela en film transparente y déjala reposar a temperatura ambiente durante al menos 30 minutos para que se relaje y sea más fácil de estirar.
* Estira la masa: Divide la masa en varias porciones más pequeñas. Estira cada porción muy fina con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta obtener láminas de aproximadamente 1-2 mm de grosor.
Los pestiños
* Forma los pestiños: Corta la masa estirada en cuadrados de unos 5-7 cm de lado. Para darles la forma tradicional, une dos esquinas opuestas del cuadrado pellizcándolas en el centro, formando una especie de lazo o rombo con un hueco en el centro.
* Fríe los pestiños: Calienta abundante aceite de oliva en una sartén profunda a fuego medio. La temperatura del aceite debe ser la adecuada para que los pestiños se doren gradualmente sin quemarse. Fríe los pestiños en tandas, unos pocos a la vez, hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados (unos 2-3 minutos por lado).
* Escurre: Retira los pestiños fritos con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
El Baño de Miel
* Prepara el baño de miel (opcional): Mientras los pestiños se enfrían ligeramente, prepara el baño de miel si lo deseas. En un cazo, calienta la miel con el agua y el zumo de limón a fuego bajo, removiendo hasta que la miel se disuelva y la mezcla esté líquida. No dejes que hierva.
* Baña los pestiños: Sumerge los pestiños fritos en el baño de miel caliente, asegurándote de que queden bien cubiertos. Retíralos con cuidado y colócalos en una fuente. También puedes rociar la miel sobre los pestiños.
* Espolvorea con azúcar glas (opcional): Si prefieres una opción sin miel, puedes espolvorear los pestiños fritos directamente con abundante azúcar glas.
* Enfría y disfruta: Deja enfriar los pestiños antes de servir. Se conservan bien en un recipiente hermético durante varios días.
¡Disfruta de estos crujientes y deliciosos pestiños andaluces! Su sabor único a anís y naranja, junto con el toque dulce de la miel o el azúcar, los convierte en un bocado irresistible.